17 de noviembre de 2010

Formas de ser

Ok. Me gusta llevarme bien con todos los que me rodean, y bueno, si existe un conflicto muy fuerte, prefiero abrirme para evitar agrandar aquellos problemas que me afectan. Será que soy sensible, no sé pero es una manera de estar tranquila conmigo misma. Ahora, "me parece que estamos mal por ahí", me confieso para mí mismo. ¿Por qué? Bueno, hace poco termine una relación amorosa (mi novio) porque no me comprendía, quizá porque para él, yo tenía “muchos peros”. Y saben que hice. Nada. Le deje solo un mensaje de texto que decía: “Hola espero que hayas escuchado el mensaje de voz de ayer. Y creo que sí porque luego apagaste el celular . Sabes lo único que quiero es saber es que te pasa. Que solamente expreses lo que sientes y listo. Necesito una explicación”. ...Nunca respondió...

Yo jamás insistí luego, me sonaba que aquel pensaría que estoy a sus pies. Después solo cambie la página para bien. Comencé o mejor dicho continúe con mis planes. Y no me quejo estoy bien. De ahí no sé si ser así sea perjudicial.

Por ejemplo, otro caso. En el trabajo, hice una nota de la Senami sobre la llegada de los restos de una de las compatriotas identificadas en la Masacre de Tamaulipas, México. ...(Qué por cierto les comentaré -haciendo un paréntesis- se reconoció a la víctima Elvia Pasochoa a través de las pruebas de ADN que se hizo a los familiares y se espera la identificación de su posible prima, también de nacionalidad ecuatoriana).


Luego, que llegue a la reunión, me llamo la atención Rolando, coordinador de Noticias, de que al expresar “los restos de la compatriota llegaran” yo había puesto “llegará”. Y que, claro, eso estaba mal. No se puede confundir el plural con el singular, los géneros y los números, en fin lo que habíamos hablado un día antes. Saben que hice. Nada. Me quede callada como si mi voz se hubiera quedado atrancada en la garganta. Solo un leve susurro dudoso respondió en frente de los presentes: “Ya voy a revisar”, pero siguieron las críticas. Quizá constructivas pero cuando tienen razón, un motivo. Si no están de más para mi parecer. Dentro de la reunión Rolando me comento que oyó en la mañana mi reporte y que fue como señala Wilson, mi gran jefe (que por cierto es una persona que admiro mucho, un gran personaje del periodismo), dice “es un golpe al oído escuchar esas cosas en una grabación”.

Ok. No me defendí, no exprese mis dudas frente a las críticas. Solo escuchaba. Claro, eso sí fui a comprobar el audio. La duda siguió conmigo. Me dije “No debe ser que sea tan....tampoco”. Corrí cuando todos se marcharon, y ahí comprobé, no había ningún error. La oración estaba perfecta: plural con plural. Entonces el error de quién era...

Bueno, le dije a mi gran jefe, quien se encontraba con Rolando y Licenia, presentadora de Noticias, como testigos. Y qué me enteré en ese momento: él no escucho mi nota, sólo Rolando. En fin solo escuche una frase del Coordinador General de Noticias, que entre risas me dijo:“...que ya le cambio”.

De ahí no sé si ser así sea perjudicial. Y nuevamente me pregunto: ¿Será que debo cambiar un poquito más?

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